La Ley 60 de Puerto Rico se ha convertido en los últimos años en el mayor atractivo de la isla para los traders e inversionistas de todo el mundo, debido al conjunto de incentivos fiscales altamente competitivos que ofrece.
En un sector financiero tan dinámico, donde los impuestos pueden significar la diferencia entre éxito o fracaso, esta ley ofrece una ventaja crucial para aquellos traders que buscan maximizar sus rendimientos y reducir su carga tributaria.
En este post te contamos qué es la Ley 60 de Puerto Rico y cómo los traders pueden aprovechar los incentivos fiscales que ofrece.
¿Qué son los Incentivos Fiscales de Puerto Rico?
Los incentivos fiscales o incentivos contributivos son una serie de beneficios que el gobierno concede a empresas o personas para que inviertan, generen empleo o impulsen la economía de Puerto Rico.
En pocas palabras, a cambio de realizar una actividad que favorezca el desarrollo del país, el gobierno puede, por ejemplo, reducir parcial o totalmente el pago de impuestos en algunas áreas, lo que se denomina descuento o exención fiscal, que es uno de los incentivos más atractivos.
Los beneficios fiscales en Puerto Rico se establecen a través de varias leyes, las más importantes son la 20, 22 y la Ley 60.
Resumen de las antiguas Leyes 20 y 22
- La Ley 20 (Ley de Servicios Exportados), creada en 2012, brindaba incentivos fiscales a las empresas exportadoras de servicios desde Puerto Rico, con el objetivo de convertir a la isla en un centro global exportador de servicios.
Quienes cumplieran con los requisitos podían beneficiarse de un impuesto fijo del 4%, junto con otros incentivos fiscales como la exención total en dividendos y una exención del 90% en impuestos sobre propiedades.
- La Ley 22 (Ley de Inversores Individuales), creada en 2012, proporcionaba beneficios fiscales a las personas con alto patrimonio que se convirtieran en residentes de Puerto Rico.
Ofrecía una exención total del 100% en todos los intereses sobre ganancias de capital, obtenidos después de establecerse en la isla, lo que representaba un ahorro fiscal considerable para los inversionistas.
Qué es la Ley 60 en Puerto Rico: Resumen
La Ley 60, creada en 2019, es un marco legal que reúne un conjunto de beneficios fiscales y financieros con el objetivo de promover el crecimiento económico de la isla.
Conocida también como el Código de Incentivos de Puerto Rico, la Ley 60 es la legislación actualmente vigente, que unifica y consolida los incentivos fundamentales incluidos en las leyes 20 y 22. Esta ley incorpora una serie de cambios que buscan profundizar el desarrollo económico sostenible y el cumplimiento de la ley.
Cambios Importantes bajo la Ley 60
Modificaciones en la Ley 20 (Servicios Exportados):
- La tasa corporativa del 4% se mantiene, pero los requisitos de cumplimiento e informes se han endurecido con la finalidad de asegurar un mayor aporte de las empresas en la economía local.
- Redefinición de las áreas de servicio, lo que podría afectar a algunas empresas que ya no califiquen para las exenciones fiscales, si sus actividades no coinciden con las áreas de desarrollo elegibles.
- Las empresas deben contratar un mínimo de empleados (generalmente cinco), dependiendo del tipo de negocio, para asegurar la creación de empleo local.
Ajustes en la Ley 22 (Inversores Individuales):
- La Ley 22, ahora parte de la Ley 60, sigue ofreciendo exenciones fiscales en dividendos, intereses y ganancias de capital, pero se han implementado nuevos requisitos para los beneficiarios.
- Se implementaron reglas de residencia más estrictas, los solicitantes deben probar que Puerto Rico es su residencia principal, además deben permanecer en la isla al menos 183 días al año.
- La Ley ahora exige que los beneficiarios realicen donaciones anuales a causas locales para devolver y aportar a la comunidad.
Aumento en la Supervisión y Rigurosidad en el Cumplimiento:
Tanto los beneficiarios individuales como corporativos están sujetos a auditorías y verificaciones más rigurosas para prevenir el abuso de los incentivos y asegurar el cumplimiento de los criterios exigidos.
Incremento de Tarifas:
Las tarifas de solicitud y los costos de cumplimiento han aumentado bajo la Ley 60, introduciendo mayores costos iniciales para quienes buscan beneficiarse de estos incentivos, reflejando el esfuerzo del gobierno por evitar el mal uso de estos beneficios.
Incentivos Fiscales de la Ley 60 para Los Traders
Presentaremos dos casos para ejemplificar cómo un trader extranjero o local puede beneficiarse de la Ley 60:
Caso 1: Trader Extranjero que se convierte en Residente de Puerto Rico
Imaginemos que un trader extranjero de EE. UU. decide residenciarse en Puerto Rico para aprovechar estos incentivos fiscales. Antes de mudarse, pagaba impuestos federales y estatales sobre sus ganancias de capital en los EE. UU., que podían llegar hasta el 20% o más, dependiendo de su nivel de ingresos.
Beneficios:
Se puede beneficiar con la Exención total de Ganancias de Capital: Después de establecer su residencia en Puerto Rico y cumplir con los requisitos de la ley, este trader puede disfrutar de una exención total sobre las ganancias obtenidas de transacciones de compraventa de acciones en la bolsa de valores u otros activos financieros, siempre que las ganancias se generen después de convertirse en residente.
Exención de Dividendos e Ingresos Pasivos: Si el trader recibe dividendos de inversiones en los EE. UU. u otros países, estos ingresos pasivos pueden estar exentos de impuestos en Puerto Rico, dependiendo de las condiciones aplicables.
Tasa Contributiva Reducida del 4% en Exportación de Servicios: Si el trader también proporciona servicios de consultoría financiera o análisis de mercado a clientes fuera de Puerto Rico, puede calificar para una tasa contributiva preferencial del 4% sobre los ingresos derivados de esos servicios exportados.
Caso 2: Trader Local que inicia un negocio de Trading en Puerto Rico
Imagina que un trader local en Puerto Rico opera en la Bolsa de Valores y decide formalizar su actividad como negocio bajo la Ley 60, para beneficiarse de las exenciones y tasas contributivas reducidas.
Se podría beneficiar con:
Tasa Contributiva Preferencial del 4% sobre Ingresos de Trading: Al formalizar su actividad de trading como un negocio que exporta servicios, por ejemplo, proporcionando análisis de mercados financieros a clientes fuera de Puerto Rico, el trader puede beneficiarse de una tasa contributiva del 4% sobre los ingresos generados por esa actividad.
Créditos Contributivos por Inversiones en Tecnología: Si el trader invierte en tecnología, software o infraestructura relacionada con su actividad de trading, puede calificar para créditos contributivos que reducen su carga fiscal. Estos créditos pueden aplicarse a la compra de equipos tecnológicos o software necesario para su operación.
Exención de Contribuciones sobre Propiedad y Patentes Municipales: Si el trader compra oficinas o bienes raíces en Puerto Rico para operar su negocio, puede obtener exenciones en las contribuciones sobre la propiedad y exención de patentes municipales, lo que disminuye los costos operativos.
Otros beneficios:
Tasa Preferencial del 2.5% sobre Ganancias de Capital: Al invertir en fondos de capital privado en Puerto Rico, el trader puede beneficiarse de una tasa impositiva preferencial del 2.5% sobre las ganancias de capital generadas por el fondo.
Exenciones en Contribuciones sobre Dividendos: Si el fondo distribuye dividendos, esos ingresos pueden estar exentos de impuestos locales, dependiendo de las condiciones aplicables.
Consideraciones Finales
Sin lugar a dudas Puerto Rico sigue siendo un refugio para traders e Inversionistas locales y extranjeros. Si bien el marco legal de la Ley 60 es más restrictivo, continúa ofreciendo reducciones fiscales muy beneficiosas para aquellos que participan en el trading y en la inversión de acciones, ya que brinda no solo estabilidad fiscal, sino también oportunidades para el crecimiento económico en un entorno atractivo y competitivo.
Con las nuevas regulaciones el gobierno busca garantizar que la isla se beneficie verdaderamente, en lugar de ser solo un refugio fiscal para inversores y empresas. Por ello la Ley 60 podría representar un avance legal hacia un desarrollo económico más equilibrado, donde las corporaciones e individuos también contribuyan al bienestar económico y social de la isla.
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